Diferencias de un Prototipo y un Producto Mínimo Viable
Muchas veces confundimos los conceptos Prototipo con Producto Mínimo Viable o MVP, llegando a utilizarlos indistintamente. Pero, es importante conocer las distinciones entre uno y otro y, sobre todo, en qué momento usarlos.
Antes que nada, tenemos que tener claro en qué momento del proyecto de la empresa o startup nos encontramos, ya que esta es la clave para entender cuál de las dos herramientas vamos a usar.
Cuando estamos en una fase inicial trabajando con ideas y conceptos, o generando una oportunidad de negocio, nos encontramos en el área del Design Thinking. Para este caso están pensadas las diferentes técnicas de prototipado, con el objetivo de identificar cuáles son los problemas u oportunidades para definir una solución.
Por otro lado, podemos estar ya en una fase posterior de validación de negocio, donde hacer test de nuestras soluciones, aprender de estos y rediseñar nuestro negocio según lo aprendido es el objetivo. Esta es la zona de actuación de Lean Startup y sus MPV (Minimum Viable Product) o Producto Mínimo Viable.
Aunque estas metodologías en ocasiones nos lleven a confusión, haciéndote las preguntas correctas podrás distinguir cuándo utilizar el prototipo y cuándo el MVP. Todo depende de qué queremos validar.
PROTOTIPO – Design Thinking
- ¿He descubierto algún problema?
- ¿Alguna oportunidad de negocio?
- ¿Realmente sé lo que necesita el usuario?
- ¿Mi solución es deseable por mi usuario?
En otras palabras, el Design Thinking habla de problemas, necesidades, conceptos e ideas, y el prototipo se encarga de validar las soluciones aportadas.
MVP – Lean StartUp
- ¿Estaría dispuesto, nuestro usuario, a pagar por el valor que hemos creado?
- ¿Cómo ganamos dinero con nuestra solución?
Aquí de lo que hablamos es de negocio (canales, recursos, etc.) y de cómo validar el modelo de negocio creado y su escalabilidad.
Herramientas de prototipado y tipos de MVP
Ahora que ya podemos situarnos y saber qué técnica usar, vamos a ver herramientas de prototipado y tipos de MVP que nos pueden ser muy útiles.
En Design Thinking tenemos distintos modelos de prototipos que podemos utilizar dependiendo de lo que queremos validar de nuestro problema-solución:
- Concept Sketch: son un conjunto de dibujos que muestran y ejemplifican una idea o concepto complejo que es difícil de explicar con palabras.
- Maqueta de Cartón: es la primera ejecución en volumen de un concepto en 3D, lo que nos ofrece una visualización real de un producto para poder realizar ajustes de manera ágil.
- Desktop Walkthrough: es una pequeña puesta en escena sobre un escenario de un servicio, con el que queremos comunicar y visualizar de manera ágil cómo funciona la solución que hemos encontrado.
- Storyboard:es un conjunto de ilustraciones que, a través de dibujos, nos cuenta una historia con el objetivo de ejemplificar un proceso.
- Infografía 3D: es una imagen digital que nos permite visualizar y entender la apariencia final de un producto antes que lo fabriquemos, por tanto, deberá ser lo más realista posible para que se asemeje a la futura realidad de la obra.
- Impresión 3D: es un proceso que nos permite obtener piezas o maquetas volumétricas de bajo coste.
En Lean StartUp, nos encontramos por un lado con el Business Model Canvas que nos ayuda a buscar distintas combinaciones para nuestro negocio de los elementos básicos (cliente, propuesta de valor, recursos clave, ingresos, etc.) y a encontrar la configuración que mejor encaja para nuestro cliente.
Por otro lado, nos encontramos con el MVP. Podemos ver distintos tipos de MVP que nos permiten validar y probar distintos aspectos de nuestro negocio con nuestro cliente:
- LANDING PAGE
Es una página web sencilla que muestra tu producto y sus características y, además, la opción a suscribirte a este, con los precios disponibles. La realidad es que el servicio aún no existe, ni el cliente puede suscribirse, pero de igual manera servirá para medir el interés de los usuarios en contratar el producto. Un ejemplo famoso de uso del esta herramienta es Buffer (1) la compañía de gestión de usuarios de redes sociales que probó su servicio a través de una landing page. - PRUEBA DE HUMO
Al igual que una landing page, una prueba de humo mide el interés de los consumidores por un producto o servicio, pero esta vez a través de otras técnicas de marketing como, por ejemplo, un video. Un caso famoso es Dropbox, la conocida multinacional que probó el servicio ideado a través de este vídeo explicativo (2). - CONSERJE
Se trata de una actividad de aprendizaje diseñada para probar las especificaciones del modelo de negocio ideado. Suele comenzar siendo una tarea muy manual y personalizada que según va validando características y ganando clientela, se va automatizando. Un ejemplo es el caso de Food on the Table, actualmente llamado Mealplanning (3), cuyo fundador comenzó realizando personalmente las tareas del negocio: preparar menús personalizados, hacer listas de la compra, comparar precios en supermercados, etc. Le fue especialmente útil el trato directo con el cliente para obtener un buen feedback con el que añadir valor a su servicio. - MAGO DE OZ
Es una herramienta similar al conserje, solo que en este caso, el cliente piensa que está interactuando con el producto real, cuando en realidad, son humanos los que están haciendo el trabajo manual. Luego, ese trabajo sería reemplazado por la automatización de un sistema. El ejemplo más conocido es el de Zappos (4), la tienda online de calzado. Al inicio, fueron los mismos creadores quienes iban a las zapaterías para adquirir el producto y mandaban el producto por mensajería para satisfacer los encargos recibidos desde su web. - CROWDFUNDING TEST
Es un método de compartir tu solución o concepto para medir el tamaño de la audiencia interesada y a su vez, empezar a recibir ingresos para seguir desarrollando el producto. Pebble (5) es la marca de relojes para deportistas que lanzó una campaña de crowdfunding a través de Kickstarter y ganó más de 10 mil dólares en 8 semanas.
Tanto si vas a probar tu prototipo o realizar un MVP, lo importante es ser capaz de escuchar la voz de tu cliente y saber trasladarla a tu producto. Si te interesa aprender más sobre metodologías puedes echar un vistazo a nuestra biblioteca.